Versículos que Muestran la Justificación por feVersículos que Muestran la Justificación por fe

Visite También Nuestras Secciones, Doctrina Cristiana y Teología y Cristianismo

23 de noviembre de 2008

La justificación es el acto legal donde Dios declara al pecador como inocente de su pecado. No es que ahora el pecador esté libre del pecado, sino que es, «declarado» libre del pecado. Esta declaración de justicia es el ser justificado delante de Dios y está basada en el derramamiento de la sangre de Jesús:

«Entonces mucho más, habiendo sido ahora justificados por su sangre, seremos salvos de la ira de Dios por medio de Él»
(Romanos 5:9).

Por Su crucifixión, muerte, sepultura y resurrección (1ª Corintios 15:1-4), Dios hace responsable de nuestros pecados a Cristo imputándoselos en la cruz:

  • «y Él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, a fin de que muramos al pecado y vivamos a la justicia, porque por sus heridas fuisteis sanados» (1ª Pedro 2:24).
  • «Al que no conoció pecado, le hizo pecado por nosotros, para que fuéramos hechos justicia de Dios en Él» (2ª Corintios 5:21).

Justificados por FE

  • «Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo» (Romanos 5:1).

Y alejados de las obras de la ley:

  • «Porque concluimos que el hombre es justificado por la fe aparte de las obras de la ley» (Romanos 3:28).

Ser salvo significa que Dios nos ha librado (salvado) de Su justo juicio de ira al colocar nuestros pecados sobre Él. Esto significa que no seremos juzgados por nuestros pecados ni seremos sentenciados a condenación eterna. Ser salvo significa que somos justificados delante de Dios. Sólo los cristianos son salvos y justificados. El tema que tenemos ahora es si esta salvación, esta justificación se obtiene por la fe o por la fe y algo más.

Primera Parte de Versículos que Muestran la Justificación por FE

  1. «Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, mas tenga vida eterna» (Juan 3:16).
  2. «es decir, la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen; porque no hay distinción» (Romanos 3:22).
  3. «siendo justificados gratuitamente por su gracia por medio de la redención que es en Cristo Jesús» (Romanos 3:24).
  4. «para demostrar en este tiempo su justicia, a fin de que Él sea justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús» (Romanos 3:26).

Segunda Parte

  1. «Porque concluimos que el hombre es justificado por la fe aparte de las obras de la ley. 29 ¿O es Dios el Dios de los judíos solamente? ¿No es también el Dios de los gentiles? Sí, también de los gentiles, 30 porque en verdad Dios es uno, el cual justificará en virtud de la fe a los circuncisos y por medio de la fe a los incircuncisos» (Romanos 3:28-30).
  2. «Porque ¿qué dice la Escritura? Y creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia» (Romanos 4:3).
  3. «mas al que no trabaja, pero cree en aquel que justifica al impío, su fe se le cuenta por justicia» (Romanos 4:5).

Tercera Parte

  1. «y recibió la señal de la circuncisión como sello de la justicia de la fe que tenía mientras aún era incircunciso, para que fuera padre de todos los que creen sin ser circuncidados, a fin de que la justicia también a ellos les fuera imputada» (Romanos 4:11).
  2. «Por eso es por fe, para que esté de acuerdo con la gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda la posteridad, no solo a los que son de la ley, sino también a los que son de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros» (Romanos 4:16).
  3. «Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo» ( (Romanos 5:1).
  4. «Entonces mucho más, habiendo sido ahora justificados por su sangre, seremos salvos de la ira de Dios por medio de Él» (Romanos 5:9).

Cuarta Parte

  1. «¿Qué diremos entonces? Que los gentiles, que no iban tras la justicia, alcanzaron justicia, es decir, la justicia que es por fe» (Romanos 9:30).
  2. «¿Qué diremos entonces? Que los gentiles, que no iban tras la justicia, alcanzaron justicia, es decir, la justicia que es por fe» (Romanos 9:33).
  3. «Porque Cristo es el fin de la ley para justicia a todo aquel que cree» (Romanos 10:4).
  4. «que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios le resucitó de entre los muertos, serás salvo; 10 porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación» (Romanos 10:9-10).

Quinta Parte

  1. «Pero si es por gracia, ya no es a base de obras, de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra» (Romanos 11:6).
  2. «sin embargo, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino mediante la fe en Cristo Jesús, también nosotros hemos creído en Cristo Jesús, para que seamos justificados por la fe en Cristo, y no por las obras de la ley; puesto que por las obras de la ley nadie será justificado» (Gálatas 2:16).
  3. «No hago nula la gracia de Dios, porque si la justicia viene por medio de la ley, entonces Cristo murió en vano» (Gálatas 2:21).

Sexta Parte

  1. «Aquel, pues, que os suministra el Espíritu y hace milagros entre vosotros, ¿lo hace por las obras de la ley o por el oír con fe? 6 Así Abraham creyó a Dios y le fue contado como justicia» (Gálatas 3:5-6).
  2. «Y la Escritura, previendo que Dios justificaría a los gentiles por la fe, anunció de antemano las buenas nuevas a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las naciones» (Gálatas 3:8).
  3. «a fin de que en Cristo Jesús la bendición de Abraham viniera a los gentiles, para que recibiéramos la promesa del Espíritu mediante la fe» (Gálatas 3:14).
  4. «Pero la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuera dada a todos los que creen» (Gálatas 3:22).

Séptima Parte

  1. «De manera que la ley ha venido a ser nuestro ayo para conducirnos a Cristo, a fin de que seamos justificados por la fe» (Gálatas 3:24).
  2. «En Él también vosotros, después de escuchar el mensaje de la verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído, fuisteis sellados en Él con el Espíritu Santo de la promesa» (Efesios 1:13).
  3. «Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios» (Efesios 2:8).

Última Parte de Versículos que Muestran la Justificación por FE

  1. «y ser hallado en Él, no teniendo mi propia justicia derivada de la ley, sino la que es por la fe en Cristo, la justicia que procede de Dios sobre la base de la fe» (Filipenses 3:9).
  2. «Sin embargo, por esto hallé misericordia, para que en mí, como el primero, Jesucristo demostrara toda su paciencia como un ejemplo para los que habrían de creer en Él para vida eterna» (1ª Timoteo 1:16).

Jacobo 2:24: No Sólo por fe

Las Escrituras enseñan claramente que somos salvos (justificados) por la fe en Cristo y por lo que Él ha hecho en la cruz. Esta fe es la que nos salva. Sin embargo, no podemos detenernos aquí sin responder lo que Jacobo registra en 2:24: «Vosotros veis que el hombre es justificado por las obras y no solo por la fe».

¿Existe contradicción entre Jacobo y Pablo? No existe contradicción. Todo lo que usted necesita hacer es mirar el contexto. Jacobo, en el capítulo 2 tiene 26 versículos: los versículos 1-7 nos instruyen a no mostrar favoritismos. Los versículos del 8-13 son comentarios acerca de la ley; y los versículos 14-26 son acerca de la relación entre la fe y las obras.

Una FE Muerta: De Acuerdo a Jacobo

Jacobo, desde el v. 14, usa el ejemplo de alguien que dice tener fe pero no tiene obras:

Jacobo 2:14

  • «¿De qué sirve, hermanos míos, si alguno dice que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Acaso puede esa fe salvarlo?».

En otras palabras, Jacobo está escribiendo acerca del tema de una fe muerta, la cual no es nada más que un pronunciamiento verbal. Está vacía de vida y de acción. Él empieza con la negativa y demuestra lo que es una fe vacía (vv. 15-17: palabras sin acciones). Entonces, él muestra que esa clase de fe no es muy diferente de la fe de los demonios: «Tú crees que Dios es uno. Haces bien; también los demonios creen, y tiemblan» (v. 19). Finalmente, él da ejemplos de cómo vivir la fe, la cual es, de palabras seguida de acciones. Él escribe de Abraham y Rahab como ejemplos de personas que demostraron la fe de ellos por sus hechos.

Dos Clases de FE

Pronto, Jacobo se encuentra examinando dos clases de fe: una que lleva a obras piadosas y una que no. Una es verdadera, la otra es falsa; una es muerta, la otra, viva; aún así: «Pero, ¿estás dispuesto a admitir, oh hombre vano, que la fe sin obras es estéril?» (Jacobo 2:20).

Note también que Jacobo menciona el mismo versículo que Pablo usa para sostener la enseñanza de la justificación por fe en Romanos 4:3. Jacobo 2:23, dice: «y se cumplió la Escritura que dice: Y Abraham creyó a Dios y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios». Si Jacobo estaba tratando de enseñar una doctrina contradictoria de fe y obras, diferente a la de otros escritores del Nuevo Pacto, entonces, no hubiera usado a Abraham como un ejemplo.

Conclusión de «Versículos que Muestran la Justificación por fe»

La justificación es por fe. La verdadera fe es obra de Dios (Juan 6:28-29), concedida por Dios (Juan 1:29) y es simultánea con la regeneración (2ª Corintios 5:17), la cual Dios trabaja en nosotros por Su voluntad (Juan 1:13). El resultado de esta justificación y regeneración, es que el pecador cambia de su pecado e inicia un hacer de buenas obras. Pero no son estas obras por las que nos ganamos nuestro lugar con Dios, ni tampoco nos sostienen delante de Él. Jesús llevó a cabo todo lo que necesitamos para ser salvos, justificados; y es, el creer realmente en lo que Dios ha hecho por nosotros en Jesús en la cruz; es por esto que la Biblia dice que somos justificados por fe (Romanos 5:1).

El creer verdaderamente en la justificación delante de Dios y la regeneración en el nuevo creyente, resultará en buenas obras.

Por Matt Slick

Presidente y Fundador del Ministerio de Apologética e Investigación Cristiana. Matt obtuvo su Licenciatura en Ciencias Sociales en la Universidad Concordia, en Irvine, California en 1988. Obtuvo su Maestría en Divinidades en el Seminario Teológico de Westminster en Escondido, California en 1991.

Deja una respuesta