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Nota: A menos que se diga lo contrario, las citas son tomadas de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA).
Abreviaturas: NP: Nuevo Pacto (Nuevo Testamento). VP: Viejo Pacto (Antiguo Testamento). LXX: Septuaginta.
Por, Luke Wayne
9 de septiembre de 2019
¿Cita Lucas 4:18 Erróneamente a Isaías 61:1?
Una acusación repetitiva contra el Nuevo Pacto es que supuestamente «cita mal» o incluso «altera engañosamente» el Viejo Pacto. Un ejemplo frecuente es donde Jesús cita en Lucas 4:18 a Isaías 61:1 como si este se hiciera referencia a dar vista a los ciegos. Pero si usted busca el versículo en el VP en inglés o español (dependiendo de la versión), no encontrará tal referencia. Esto parece, a primera vista, un error del Nuevo Testamento. Sin embargo, la realidad es que no se trata de ningún error o engaño. Jesús simplemente citó una paráfrasis interpretativa que le era familiar a Su audiencia.
Los Versículos
A continuación, leemos los pasajes claves involucrados en el artículo.
Isaías 61:1
- «El Espíritu del Señor Dios está sobre mí, Porque me ha ungido el Señor Para traer buenas nuevas a los afligidos. Me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, Para proclamar libertad a los cautivos Y liberación a los prisioneros».
Lucas 4:18
- «EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE MÍ, PORQUE ME HA UNGIDO PARA ANUNCIAR EL EVANGELIO A LOS POBRES. ME HA ENVIADO PARA PROCLAMAR LIBERTAD A LOS CAUTIVOS, Y LA RECUPERACIÓN DE LA VISTA A LOS CIEGOS; PARA PONER EN LIBERTAD A LOS OPRIMIDOS».
Como pudo leer en Isaías 61, la cláusula «la recuperación de la vista a los ciegos» está notablemente ausente. Entonces, ¿de dónde sacaron Jesús y Lucas la idea de que este versículo predecía que los ciegos recuperarían la vista? La respuesta es bastante instructiva.
La LXX y el Nuevo Pacto
Los autores del NP, escribieron en griego antes que en el hebreo. Con frecuencia –aunque no siempre– citaban la antigua traducción griega del Viejo Pacto conocida como la LXX (Septuaginta). Por eso, cuando se establece un tema como este, los manuscritos de la LXX son el primer lugar al cual acudir. En este caso, la Septuaginta registra:
- «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido; me ha enviado a llevar la buena noticia a los pobres, a curar a los quebrantados de corazón, a proclamar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos» (Isaías 61:1).1
Nótese que la referencia a «la vista a los ciegos» está presente. Por tanto, ni Jesús ni los escritores del NP inventaron esta referencia. Ya aparecía en una versión judía popular de Isaías anterior a la época de Cristo.
Lucas 4:18
Entonces, basándonos sólo en esta información, el versículo en Lucas tiene mucho sentido. Jesús pudo haber estado leyendo de la Septuaginta (o, más probablemente, una versión hebrea similar a la que se usó en la traducción de la LXX). Simplemente porque esa era la versión usada en esa sinagoga en particular. Estaba leyendo el rollo que tenía delante de Sí. Tal escenario no implica ningún error o engaño por parte de Jesús (o Lucas) y encaja bastante bien en el contexto histórico. Así pues, basándonos únicamente en la LXX, ya podemos concluir que no se trata de un defecto del NP.
Profundizando Más
Sin embargo, esto nos deja otra pregunta. ¿Por qué la Septuaginta contiene esta cláusula? ¿De dónde procede esta interpretación de Isaías 61:1? La respuesta es fascinante y, de nuevo, encaja bien con la narración histórica de Lucas 4.
Los Rollos del Mar Muerto contenían múltiples copias de Isaías. Entre estas, se encontró una versión hebrea de Isaías 61:1 que, en lugar de «libertad a los cautivos», se refiere a la «liberación de las tinieblas» o a «abrir los ojos» de los prisioneros.2 Esta versión no parece haberse limitado a la comunidad de Qumrán. La traducción aramea posterior (o «Tárgum») de Isaías afirma de forma similar que «los que están atados serán revelados a la luz».3 Esta redacción podría referirse a los prisioneros encerrados en una mazmorra oscura y luego liberados para salir a la luz. Pero también podría entenderse que describe la apertura literal de los ojos ciegos para ver (como la tomaron claramente, los traductores de la LXX).
La Comunidad de Qumrán
Parece que esta comunidad también lo leyó de esa manera. Uno de los rollos del Mar Muerto conocido como el «Apocalipsis mesiánico» (o 4Q521) combina abiertamente Isaías 61:1 con el milagro de dar la vista a los ciegos4 y lo considera una profecía mesiánica. Esta interpretación también puede haberse visto reforzada por las similitudes entre Isaías 61 e Isaías 42. Así como en 61:1 comienza «El Espíritu del Señor Dios está sobre mí, Porque el Señor me ha ungido Para dar buenas nuevas a los afligidos …». E Isaías 42 comienza:
- «He aquí mi siervo, a quien sostengo; mi escogido, en quien se deleita mi alma. He puesto mi Espíritu sobre él; Él traerá justicia a las naciones» (Isaías 42:1).
Unos pocos versículos después, leemos:
- «Para que abras los ojos a los ciegos, Para que saques de la cárcel a los presos, Y de la prisión a los que moran en tinieblas» (Isaías 42:7).
¿Un Contexto Similar?
Así es. La «apertura o el abrir los ojos a los ciegos» está directamente relacionada con la liberación de prisioneros. Este paralelismo pudo haber influido en las primeras lecturas judías de Isaías 61. En cualquier caso, había una versión en hebreo que hablaba de la «liberación de las tinieblas» o de la «apertura de los ojos», y muchos judíos antiguos entendieron que se refería a los ciegos que recibían la vista. Esto es, sin duda, lo que llevó a que la versión de la LXX hiciera referencia explícita a ello. Es probable que también fuera el origen de la versión que leyó Jesús. Así pues, el relato de Lucas 4 encaja muy bien en el contexto histórico de la época. Tenemos todos los motivos para confiar en ella.
- Aquí, esta traducción es de, “A New Translation of the Septuagint” (Oxford University Press, 2007). ↩
- Las traducciones de la variante de lectura en los Rollos del Mar Muerto que figuran aquí proceden de Martin Abegg Jr., Peter Flint y Eugene Ulrich, «The Dead Sea Scrolls Bible» (HarperCollins Books, 1999). ↩
- La traducción del Tárgum arameo que se ofrece aquí procede de Bruce D. Chilton, «The Aramaic Bible, Volume 11: The Isaiah Targum» (The Liturgical Press, 1987). ↩
- Geza Vermes, “The Complete Dead Sea Scrolls in English” (Penguin Books, 2004) 412-413. ↩