¿Qué es «ser tomado» en el Espíritu?¿Qué es «ser tomado» en el Espíritu?

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NOTA: A menos que se diga lo contrario, las citas son tomadas de la Nueva Biblia de las Américas — NBLA.

Abreviaturas: NTV: Nueva Traducción Viviente. TLA: Traducción en lenguaje actual. RV60: Reina Valera 1960

31 de julio de 2009

¿Qué es «ser tomado» en el Espíritu?

Es un fenómeno que ocurre en las iglesias carismáticas. Supuestamente lo que ocurre es cuando un cristiano es tan vencido por el Espíritu Santo que cae al suelo y queda incapacitado por un tiempo. A veces se asocia con temblores, gritos y hablar en lenguas. Hay registros de tales ocurrencias en todo tipo de iglesias a lo largo de los últimos cientos de años, pero si esto es o no un acto de Dios o va más allá de lo emotivo no podemos decirlo con seguridad.

Cuando Ocurre Este Suceso

Por lo general, ocurre en un servicio de la iglesia después de un período de adoración y predicación. Previamente, la congregación ha sido llevada a un estado de gran fervor emocional. Las personas se acercan para recibir una bendición especial, a menudo con el propósito expreso de «ser tumbados» en el espíritu. El predicador entonces toca a la persona que cae hacia atrás y es atrapada por los asistentes o diáconos que están allí para evitar lesiones resultantes de la caída.

Sin duda, hay personas que están tan emocionalmente preparadas que desean tener una experiencia espiritual. Se convencen a sí mismas de que están siendo tumbadas en el espíritu, que ante cualquier «toque» caen rendidas. Esto es especialmente probable en un servicio religioso diseñado para elevar el nivel emocional de los participantes.

¿Es Real Este Fenómeno?

No podemos afirmarlo. Ciertamente, hay sucesos falsos, pero es ciertamente posible que el Espíritu Santo pueda venir sobre una persona con tal fuerza que la persona caiga. Pero, bíblicamente, tales sucesos, como el caer son hacia adelante y están acompañados con postración humilde.

Génesis 17:3:

  • «Entonces Abram se postró sobre su rostro, y Dios habló con él, diciendo …» (RV60).

Números 16:20-22:

  • «Y el SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: 21 —¡Aléjense de todas estas personas para que pueda destruirlas en el acto! 22 Pero Moisés y Aarón cayeron rostro en tierra y rogaron: —¡Oh Dios, tú eres el Dios que da aliento a todas las criaturas! ¿Tienes que enojarte con todo el pueblo cuando solo un hombre peca?» (NTV).

1º Reyes 18:39:

  • «Cuando todo el pueblo vio eso, se inclinó hasta tocar el suelo con su frente y dijo: ‘¡El Dios de Israel es el Dios verdadero! ¡Él es el Dios verdadero!’» (TLA).

Apocalipsis 1:17-18:

  • «Cuando lo vi, caí como muerto a Sus pies. Y Él puso Su mano derecha sobre mí, diciendo: ‘No temas, Yo soy el Primero y el Último, 18 y el que vive, y estuve muerto. Pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades’».

Siempre debemos usar la Biblia cuando tratamos de determinar si algo que ocurre en la iglesia es bíblico. Vemos en las Escrituras que cada vez que la presencia misma de Dios viene sobre una persona, esta es humillada a tal grado que inclina su cabeza y a menudo cae en postración. Esto no es igual que asistir a la iglesia a un servicio que lleva a las personas a un estado «emocional». Posteriormente se hace un llamamiento para recibir una «bendición especial». Así, el predicador toca la frente de la persona para que pueda caer de espaldas.

Por qué Debemos Tener Cuidado

Sin embargo, debemos ser muy prudentes por tres razones. En primer lugar, no queremos menospreciar el movimiento real del Espíritu Santo. Es ciertamente posible que la presencia de Dios pueda tumbar a alguien. Segundo, no queremos sustituir la presencia de Dios por el emocionalismo. Tercero, debemos considerar a los no creyentes. No queremos hacerlos tropezar con comportamientos que pueden ser nada más que arrebatos emocionales.

Por Matt Slick

Presidente y Fundador del Ministerio de Apologética e Investigación Cristiana. Matt obtuvo su Licenciatura en Ciencias Sociales en la Universidad Concordia, en Irvine, California en 1988. Obtuvo su Maestría en Divinidades en el Seminario Teológico de Westminster en Escondido, California en 1991.