Microevolución contra MacroevoluciónMicroevolución contra Macroevolución

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Por, Luke Wayne
27 de septiembre de 2022

Debido a que el término «evolución» puede utilizarse en más de un sentido, y las conversaciones sobre la teoría de Darwin pueden ser confusas al tener en una palabra múltiples definiciones, muchas personas encuentran útil hacer una distinción entre «microevolución» (pequeños cambios dentro de un tipo concreto de organismo) y «macroevolución» (grandes cambios necesarios para pasar de un tipo de organismo a otro).

Los Cambios a Pequeña Escala

Un crítico del darwinismo, por ejemplo, a menudo querrá aclarar que está de acuerdo en que con bastante frecuencia estos cambios a pequeña escala se producen dentro de un tipo determinado de organismo, pero que dichos cambios tienen límites y no pueden acumularse unos con otros del modo que terminaría con la aparición de un tipo de organismo completamente nuevo. Un individuo podría expresarlo así: «Creo en la microevolución, pero no en la macroevolución». Estas categorías pueden ser útiles para mantener las conversaciones centradas en los temas adecuados o como punto de partida para discutir los límites de mecanismos como la mutación aleatoria y la selección natural.

Definiendo Términos

El biólogo darwinista Theodosius Dobzhansky introdujo la terminología de «microevolución» y «macroevolución» en su obra en inglés escrita en 1937 «Genetics and the Origins of Species». Desde entonces, esta terminología se ha vuelto común para distinguir entre el tipo de pequeños cambios que observamos claramente dentro de las poblaciones del mismo tipo básico de organismo y las transformaciones más grandes y fundamentales requeridas por la evolución darwiniana (que, según argumentan los darwinistas, tardan demasiado en ser observadas directamente).

Microevolución y Macroevolución

La microevolución se refiere a los cambios dentro de una categoría precisa de animales. Por ejemplo, un perro salvaje que cambia gradualmente a través de muchas generaciones a beagles, pug o los poodle. O en el caso de un gato salvaje primitivo que acaba engendrando un león en un entorno o un gato doméstico en otro. La macroevolución, en cambio, sería el tipo de cambio necesario para producir una categoría u organismo a partir de otro, como los anfibios que dan lugar a los reptiles o los reptiles a las aves.[1. A. E. Wilder, The Scientific Alternative to NeoDarwinian Evolution (TWFT Publishers, 1987) x.]

Cambio Ordinario: La Microevolución

Así pues, la microevolución es el tipo de cambio ordinario en la que todos están de acuerdo en que se produce en las poblaciones de seres vivos. No se discute. Los pastores, los agricultores, los criadores de perros y todo tipo de hombres y mujeres corrientes han conocido este tipo de cambio y han dependido de este durante toda la historia de la humanidad. El hombre ha utilizado activamente esta capacidad de cambio en las plantas y los animales para dar forma a nuestros cultivos, al ganado y a otras plantas y animales domesticados. Es evidente que también se da en la naturaleza. Mecanismos como la selección natural que actúan sobre la variación ordinaria son ciertamente capaces de producir esta escala de cambio.

La Macroevolución: Un Asunto Totalmente Distinto

Así lo explica el Dr. Robert P Waltzer:

  • «Por el contrario, la macroevolución, significa un cambio evolutivo que produce estructuras biológicas y formas de vida fundamentalmente nuevas. En algún momento de la historia de la vida no había alas de pájaro. Y luego, con el tiempo, las hubo. Si los procesos evolutivos inventaron las alas de los pájaros, eso es macroevolución».[2. Thomas Y. Lo, Paul K. Chien, Eric H. Anderson, Robert A. Alston, Robert P. Waltzer, Evolution and Intelligent Design in a Nutshell (Discovery Institute, 2020) 91.]

Mientras que la microevolución es fácilmente aceptada por casi todo el mundo, la macroevolución está en el centro de la mayoría de los debates relacionados con el darwinismo».

Macroevolución y Enfoque Conversacional

Así, cuando los críticos del darwinismo especifican que rechazan la macroevolución y no la microevolución, están señalando que, si bien todo el mundo está de acuerdo en que se producen ciertos cambios limitados dentro de determinados tipos de organismos o grupos de organismos, el área de debate trata sobre si una categoría básica de planta, animal, hongo o microbio puede convertirse en una categoría totalmente diferente o puede adquirir estructuras o sistemas novedosos que redefinan el tipo de organismo que son.

Por qué son Importantes los Usos más Básicos y Útiles de Ambos Términos

Ayudan a centrar la conversación. Cuando alguien dice vagamente que no cree en la «evolución», a menudo, el darwinista señalará cualquier ejemplo. Incluso el más pequeño cambio en un organismo y honestamente creerá que ha hecho un punto sólido. Las dos personas no se ponen de acuerdo porque quieren decir cosas diferentes con la misma palabra. Pero, cuando se aclara que se trata específicamente de macroevolución, esto proporciona más claridad.

Lo que NO se Constituye Como Macroevolución

Por ejemplo, cosas como el cambio de forma del pico de un pinzón o el desarrollo de la resistencia a los antibióticos en una determinada bacteria. El pinzón no deja de serlo y la bacteria sigue siendo el mismo tipo básico. Estos ejemplos son prácticamente irrelevantes porque representan el tipo de cambios en los que ambas partes ya están de acuerdo.

Por lo tanto, al centrar la conversación en la macroevolución, se pueden reducir los malentendidos y, al menos parcialmente, ayudar a mantener la conversación en un camino fructífero.

¿Sólo Microevolución en el Tiempo?

Microevolución contra Macroevolución
Microevolución contra Macroevolución

Por supuesto. Una de las objeciones más comunes que plantean los darwinistas es que no existe una diferencia fundamental entre la micro y la macroevolución. Al fin y al cabo, los «grandes» cambios de los que hablamos no son más que la suma total de muchísimos pequeños cambios que se producen a lo largo de un amplio periodo de tiempo. Si la microevolución es cierta, y se prolonga literalmente durante millones o miles de millones de años, ¿no supondría eso unos cambios bastante radicales, que incluso llevarían a la aparición de tipos de organismos totalmente diferentes?

¿Qué nos Dice Nuestra Experiencia?

La primera y más sencilla respuesta es que nos dice lo contrario. El hocico de un perro puede cambiar con el tiempo de diversas maneras: volviéndose más corto o largo, más ancho o estrecho. Su pelaje puede alterar su color, longitud, grosor, textura, o incluso desaparecer prácticamente dejando la piel mayoritariamente calva. Su cola puede volverse más larga, fina, gruesa, tupida, o volverse corta y enroscada. Sus patas pueden volverse largas, anchas, cortas o rechonchas. También pueden cambiar de forma para adaptarse a diversos terrenos. Su cuerpo puede volverse alargado como un perro salchicha, delgado como un galgo o ancho y corto como un bulldog inglés. Sin embargo, ninguno de estos cambios afecta a la estructura fundamental del «perro». Ninguna versión del hocico es un paso hacia otra cosa que no sea un hocico. Ninguna forma de la pata se desvía ni siquiera un poco de la definición de pata.

Variaciones Posibles

Todo tipo de variación es posible, pero sólo dentro de los límites esenciales del mundo «perruno». Ninguna de las innumerables variaciones que vemos dentro de los perros son el tipo de cambios que podrían «sumarse» a algo fundamentalmente no canino, sin importar cuántos de esos cambios se produzcan. Se podría bromear diciendo que un chihuahua o un poodle no son «perros de verdad». Solo es una broma. Ciertamente se han alejado mucho de sus ancestros lobos, pero no tanto como para convertirse en otra cosa.

Los reproductores humanos y la selección natural tienen el mismo muro. Están limitados por los tipos de variación que se producen. Sólo pueden elegir entre las variantes que surgen. Y esos cambios están limitados dentro de los límites fundamentales de lo perruno, gatuno, etc.

Por qué la Selección Natural Sólo Puede Producir Microevolución

Esto no es una mera suposición. Por su misma naturaleza, la selección natural es un proceso fundamentalmente autolimitado. Su funcionamiento siempre evitará la construcción de nuevas estructuras o sistemas complicados más allá de un punto muy pequeño y estrecho. Como dice el Dr. Michael Behe:

  • «La evolución darwiniana se autolimita: los mismos factores que hacen que funcione bien a pequeña escala garantizan que no vaya muy lejos».[3. Michael Behe, Darwin Devolves (HarperOne, 2019) 172.]

¿Qué Impulsa la Evolución Darwiniana?

La selección natural que actúa sobre la variación aleatoria. Se producen mutaciones genéticas espontáneas y no planificadas que provocan variaciones relativamente pequeñas dentro de una especie o categoría de organismos. Si estas variaciones son perjudiciales en un entorno determinado (lo que suele ocurrir), mueren y / o no se reproducen, por lo que esa variación deja de existir rápidamente. Si proporcionan un beneficio, tendrán éxito y se reproducirán y, con el tiempo, habrá más y más de ellas. Así es como se produce la microevolución, y el proceso básico es incontrovertido.

¿Cómo se Prueban las Variaciones?

Hélice de ADN
Hélice de ADN

Sin embargo, la descripción anterior está un poco simplificada. Las variaciones no se ponen en fila y se prueban de una en una de forma organizada. Pueden producirse muchas variaciones en diferentes miembros de la misma especie al mismo tiempo y en el mismo lugar. Así, cada variante no sólo compite con la forma «ordinaria» ya establecida del organismo, sino también con todas las demás variantes. Una mutación que proporciona un pequeño beneficio puede perder ante otra variación que proporciona un mayor beneficio inmediato.

¿Cómo Ayuda una Mutación al Organismo?

Además, es fundamental tener en cuenta que «beneficioso» no es lo mismo que constructivo o de desarrollo. En otras palabras, una mutación puede ayudar al organismo dañando o desechando una estructura actual en lugar de añadir alguna estructura nueva. De hecho, la gran mayoría de las mutaciones beneficiosas son de este tipo. Y esto tiene sentido. Estas mutaciones son aleatorias. No intentan resolver sistemáticamente los problemas que plantea un entorno determinado. Y es más probable que los cambios pequeños y aleatorios rompan algo antes que construir algo nuevo, funcional y útil. Sin embargo, romper un sistema o incluso abandonar por completo una estructura no es necesariamente algo malo, especialmente como estrategia no planificada y a corto plazo.

Un Simple Ejemplo

Si está atrapado en un barco en medio de una tormenta y está empezando a hundirse, deshacerse de la carga para aligerar el barco es más fácil y probablemente más eficaz que tratar de responder a ese entorno inminentemente mortal construyendo un nuevo y mejor sistema de flotación. Esto es especialmente cierto si no tiene conocimiento de ingeniería y tendría que construir el nuevo sistema a través de pequeños actos aleatorios de retoques no planificados.

¿Quién Gana en el Juego de la Selección Natural?

Las variaciones que rompen o descartan un sistema o estructura son las que ganarán. Esto es cierto incluso cuando tales variaciones pueden ser posiblemente perjudiciales a largo plazo. Y las mutaciones de este tipo no son ciertamente pasos plausibles para desarrollar una categoría de organismo más nueva y compleja, Como respuesta inmediata a un desafío actual (que es lo único relevante para la selección natural ciega) la opción de ruptura es más rápida, más eficiente y típicamente más efectiva que intentar construir algo nuevo a través de pequeños incrementos aleatorios (cada uno de los cuales tendría no sólo que ser beneficioso sino que tendría que ganar sistemáticamente frente a las opciones rivales de ruptura beneficiosas).

¿Romper o Construir un Sistema?

Otro factor es que, debido a que hay más formas de romper un sistema que de construirlo, siempre habrá muchas más variaciones que impliquen sistemas rotos o eliminados que variaciones que impliquen algo que pueda llamarse remotamente construcción. Esto significa que para cualquier mutación constructiva siempre habrá muchas variedades destructivas pero beneficiosas con las que competir. Y en cada paso, una o más de las versiones destructivas siempre tendrán más probabilidades de proporcionar el mayor beneficio inmediato.

Esto Afirma Michael Behe

  • «No es tanto la rareza de las mutaciones constructivas lo que socava la evolución darwiniana. Es la frecuencia de las perjudiciales pero beneficiosas. Las mutaciones degradadas pero que se adaptan … aparecen rápidamente incluso en escalas de tiempo cortas, incluso en poblaciones pequeñas. No necesitan un gran número ni mucho tiempo para producirse. Por lo tanto, siempre estarán presentes en cualquier lugar de la vida más rápidamente y en un número mayor que las mutaciones … constructivas. Las mutaciones dañinas pero beneficiosas se seleccionarán rápidamente cuando no existe nada más disponible y competirán ferozmente con cualquier mutación [constructiva] que pueda llegar a aparecer».[4. Michael Behe, Darwin Devolves (Harper One, 2019) 186.]

Un Nuevo Diseño NO es Construido

Así, los procesos puramente no planificados, como la selección natural que actúa sobre la mutación aleatoria, favorecerán finalmente, la simplificación del organismo existente en lugar de construir un nuevo diseño para un organismo fundamentalmente diferente. Estos procesos son excelentes para responder rápidamente a los nuevos entornos, del mismo modo que los marineros son excelentes para responder a una tormenta repentina. En ambos casos, identifican rápidamente qué cosas pueden abandonarse para seguir vivos en medio de los nuevos desafíos. Es un enfoque útil y que salva vidas, pero nunca va a construir nuevos sistemas complejos.

Conclusión de «Microevolución contra Macroevolución»

Los críticos de la evolución darwiniana no cuestionan todas las formas de cambio biológico. Están de acuerdo con la microevolución, es decir, con que se produzcan ciertos tipos de cambios pequeños, pero a veces útiles, dentro de un determinado tipo de organismo.

Finalmente en, «Microevolución contra Macroevolución»: ¿Qué es lo que Niega la Macroevolución?

La afirmación de que los procesos naturales ciegos son suficientes (incluso de forma acumulativa durante un periodo de tiempo muy largo) para producir tipos de organismos nuevos y totalmente diferentes. No sólo la microevolución es el único tipo de cambio biológico que se ha observado, sino que, además, y más importante, la propia naturaleza de la selección natural que actúa sobre la mutación aleatoria garantiza que no producirá el tipo de resultados radical y complejamente constructivos que exige la macroevolución. Por lo tanto, es totalmente racional aceptar la microevolución mientras se rechaza la idea de que esos pequeños cambios se sumen a una transición de un tipo de organismo a otro.

 

Por Carlos E. Garbiras

Carlos Enrique Garbiras es Director general en Ministerio de Apologética e Investigación Cristiana (MIAPIC). Actualmente, sirve en predicación y enseñanza de la Palabra de Dios en Bogotá, donde dirige además la Escuela de Estudios Teológicos MIAPIC.

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