¿Atacan los Mormones a Otras Religiones?

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Abreviaturas: IJSÚD: Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

17 de diciembre de 2008

¿Atacan los Mormones a Otras Religiones?

A los mormones no les gusta cuando su organización es etiquetada como un culto no cristiano. Esto les molesta.  En consecuencia, desean desesperadamente ser aceptados como cristianos por la comunidad cristiana. La iglesia mormona gasta bastante tiempo y dinero en relaciones públicas con el fin de exhibir un retrato de una denominación cristiana amante, orientada hacia la familia, que no condena. Pero los cristianos reaccionan ante esto y citan las grandes diferencias en la doctrina entre mormones y cristianos. Es por ello que continúan afirmando que la IJSÚD como un culto no cristiano.

Pero ¿es Cierto que los Mormones Atacan a Otras Religiones?

Sí. Pero la batalla continúa y los mormones tratan de clamar que ellos no van por ahí condenando otras religiones como lo hacen los «antimormones». Dicen que ellos perdonan, son tolerantes, gente cristiana buena que no dicen nada contra nadie. Reclaman ser los más parecidos a Cristo.

Es comprensible su deseo de dar una buena imagen. Pero, la pregunta se mantiene: ¿La iglesia mormona condena a otros sistemas religiosos? La respuesta es definitiva: «Sí». Veamos a algunos escritores mormones y leamos lo que han dicho.

Joseph Smith

Primera Parte:

• (Con respecto a la supuesta primera visión de Joseph Smith en la que se le aparecieron personajes celestiales) … «Mi objetivo al ir a consultar al Señor era saber cuál de todas las sectas era la correcta, para saber a cuál unirme. Tan pronto como tomé posesión de mí mismo para poder hablar, pregunté a los personajes que estaban sobre mí en la luz, cuál de todas las sectas era la correcta y a cuál debía unirme. Se me contestó que no debía unirme a ninguna de ellas, porque todas estaban equivocadas, y el personaje que se dirigió a mí dijo que todos sus credos eran una abominación a Sus ojos: que esos profesantes eran todos corruptos …» (Joseph Smith, «Historia de la Iglesia» («History of the Church«), vol. 1, p. 5-6).

Segunda Parte:

• «¿Qué es lo que inspira a los profesantes del cristianismo en general una esperanza de salvación? Es esa suave y sofisticada influencia del diablo, por medio de la cual engaña al mundo entero» («Enseñanzas del Profeta Joseph Smith», compiladas por Joseph Fielding Smith, p. 270).
• En preguntas dirigidas a Joseph Smith, el fundador del mormonismo …
  Primero: «¿Creen ustedes en la Biblia?». «Sí lo hacemos, somos las únicas personas bajo el cielo que lo hacen, pues no hay ninguna de las sectas religiosas del día que lo haga»
  Tercero: «¿Se condenarán todos menos los mormones?». «Sí, y gran parte de ellos, a menos que se arrepientan y obren rectamente». («Enseñanzas», [«Teachings«] página 119).

Brigham Young

• «Pero Él sí envió a Su ángel a esta misma persona oscura, Joseph Smith hijo, quien después se convirtió en Profeta, Vidente y Revelador, y le informó que no debía unirse a ninguna de las sectas religiosas de la época, porque todas estaban equivocadas» (Brigham Young, «Diario de Discursos» [«Journal of Discourses«], vol. 2, 1855, p. 171).

John Taylor

• «Hablamos del cristianismo, pero es una perfecta sarta de tonterías … Yo mismo y cientos de ancianos a mi alrededor hemos visto su pompa, desfile y gloria; ¿y qué es? Es un metal que resuena y un símbolo que tintinea; es tan corrupto como el infierno; y el Diablo no podría inventar un mejor motor para difundir su obra que el cristianismo del siglo XIX» («Diarios de Discursos» [«Journal of Discourses«], vol. 6, 1858, p. 167).
• ¿Dónde buscaremos el verdadero orden o autoridad de Dios? No puede encontrarse en ninguna nación de la cristiandad» («Diarios de Discursos» [«Journal of Discourses«] , vol. 10, 1863, p. 127).

James Talmage

• «Una interpretación autosugestionada de la historia indica que ha habido un gran alejamiento del camino de salvación establecido por el Salvador, una apostasía universal de la Iglesia de Cristo» («Los Artículos de Fe» [«The Articles of Faith«], Deseret Book Company, Salt Lake City, p. 182).

Bruce McConkie

• «Con la pérdida del evangelio, las naciones del mundo entraron en un eclipse moral llamado Edad Oscura» («Doctrina Mormona» [«Mormon Doctrine«], Bookcraft, Salt Lake City, Utah, pág. 44).

Joseph Fielding Smith

• «Una vez más, después de la muerte de sus apóstoles, se estableció la apostasía, y otra vez se cambiaron los principios salvíficos y las ordenanzas del evangelio para adaptarlos a las conveniencias y nociones de la gente. Se corrompieron las doctrinas, se perdió la autoridad, y un falso orden religioso ocupó el lugar del evangelio de Jesucristo, tal como había sucedido en dispensaciones anteriores, y el pueblo quedó en tinieblas espirituales» («Doctrinas de Salvación» [«Doctrines of Salvation«], página 266).

El Libro de Mormón

• «Y él me dijo: Mira, solamente hay dos Iglesias; una es la iglesia del Cordero de Dios y la otra es la iglesia del Diablo: por lo que, quien no pertenezca a la iglesia del Cordero de Dios pertenecerá a esa gran iglesia que es la madre de las abominaciones; y ella es la ramera de toda la tierra» (1 Nefi 14:10).

• «Y, cuando venga el día en que de la ira de Dios sea derramada sobre la madre de las rameras, que es la gran y abominable iglesia de toda la tierra, cuyo cimiento es el demonio, entonces, en ese día, el trabajo del Padre comenzará …» (1 Nefi. 14:17).

Doctrinas y Convenios (D&C)

• «De verdad, os digo, la oscuridad cubrirá la tierra y una tremenda oscuridad cubrirá la mente de la gente y toda carne se ha corrompida ante mi faz»  (Doctrina y Convenios 112:23).

Conclusión

Cuando los misioneros mormones vienen a la puerta y hacen su presentación del «evangelio», mencionan una apostasía y la necesidad de un profeta, su profeta, para restaurar las verdaderas Enseñanzas de Jesús. Por supuesto que estas enseñanzas «restauradas» son completamente falsas.

Sin embargo, la iglesia mormona condena claramente a otros sistemas religiosos.  Aquellos mormones que se quejan de mal tratamiento deberían familiarizarse con las palabras de sus maestros.