Visite también nuestra Sección, Versículos examinados del Viejo Pacto
Visite también nuestra Sección, Apologética

«Y sucederá que si todavía no creen estas dos señales, ni escuchan tu voz, entonces sacarás agua del Nilo y la derramarás sobre la tierra seca; y el agua que saques del Nilo se convertirá en sangre sobre la tierra seca» (Éxodo 4:9).

Este versículo no significa que Dios no sabe lo que sucederá. Primero: Dios conoce todas las cosas: «en cualquier cosa en que nuestro corazón nos condene; porque Dios es mayor que nuestro corazón y sabe todas las cosas» (1ª Juan 3:20), por eso, Él nos puede decir lo que sucederá en el futuro, aun cuando las personas tomen diferentes opciones en el presente. Por lo tanto, si Dios sabe lo que usted hará, Él lo sabrá antes que usted lo haga, y si lo hace, eso es lo que sucederá. Y esto, no muestra inseguridad. Al contrario, está mostrando que Dios, sí sabe lo que sucederá aun en diferentes opciones. Si Dios no tuviera un conocimiento amplio del futuro (tanto el real como lo que pueda suceder), entonces, no sería posible que nos dijera lo que sucederá.

Segundo: Dios trabaja dentro del ámbito del tiempo de las personas. Y esto es un hecho, debido a que vemos en la Biblia, cómo Dios les dice a las personas lo que les sucederá posteriormente en sus vidas. Estas profecías no se volvieron realidad sino hasta después, cuando ya había llegado el tiempo de su cumplimiento. Por lo tanto, y desde nuestra perspectiva, Dios espera y lleva a cabo Sus deseos, aun después de mucho tiempo, probando así, que Él trabaja con nosotros con relación a nuestro marco de tiempo. En esta relación con el tiempo, Dios entonces nos dará predicciones condicionales; es decir, si alguien hace algo se obtendrá entonces un resultado; si ese alguien hace otra cosa, tendremos otro resultado. Este versículo no implica necesariamente que Dios no conoce el futuro. Al contrario, demuestra que Él si lo conoce.

Por Matt Slick

Presidente y Fundador del Ministerio de Apologética e Investigación Cristiana. Matt obtuvo su Licenciatura en Ciencias Sociales en la Universidad Concordia, en Irvine, California en 1988. Obtuvo su Maestría en Divinidades en el Seminario Teológico de Westminster en Escondido, California en 1991.

Deja una respuesta